Una de las características más notables del horror de los 80s es su cualidad corporal. El terror que afecta la composición misma de sus víctimas, transformando su estructura física de manera grotesca como un reflejo de la pudrición mental que los atormenta. Seguro el primer autor que viene a nuestras memorias es el gran Cronenberg, tal vez el principal responsable del auge que tuvo este estilo o vertiente. La lista es larga: The Fly, Videodrome, Re-Sonator, The Stuff...ejemplos sobran, pero uno de los mejores es Society de Brian Yuzna. Una peli asquerosa, divertida y fundamentalmente con mucho que decir. Loco, hace falta más gente que utilice el terror como medio para contar cosas interesantes que exceden al mero hecho de asustarse.
Yuzna es un personaje importante en el cine de género ochentero, el Filipino dio sus primeros pasos como productor de cintas de terror entre las que podemos contar Re-Animator, Dolls, Warlock el brujo y el hit Querida, he encogido a los niños. Society es su primer trabajo en la silla de director y debo decir que se nota. Es una película de genero muy bien filmada y con recursos técnicos y de maquillaje notorios. En su momento fue un éxito moderado en el público europeo pero fue encajonada para las audiencias norteamericanas que parecen ser un tanto más...pacatas a la hora de ver películas. En perspectiva podemos considerar a Society como una de las joyitas más originales del body horror y el terror de los 80s en general.
Bill Whitney es un joven de familia acomodada para el cual la vida pareciese estar acomodada. Tiene una bellísima novia, es popular y está camino a ser presidente de su clase. Todo sería perfecto si no fuese porque Bill se siente un extraño en su propio hogar. Algo dentro suyo le dice que no pertenece a ese mundo, se siente pesado en su piel y solo encuentra desahogo conversando con su psicólogo, el Dr. Cleveland. No puede evitar notar que algo extraño sucede en su seno familiar mientras la ceremonia de bienvenida de su hermana a “la sociedad” se aproxima. Poco a poco las sospechas se traducen en paranoia cuando se suceden muertes y eventos de los más bizarro ¿Que es lo que pasa en la sociedad?
Yuzna se decidió por un tono de suspenso al que le agrego ese dejo de comicidad e histrionismo que posee el terror ochentero. Durante gran parte de la película veremos a Bill buscando respuestas y desconfiando de todos los que aseguran que nada sucede. Hay un manejo muy inteligente de la información que genera en nosotros ansiedad por correr el telón y descubrir el horror que acecha. La conformación del universo donde acontece Society, tiene tintes surreales que contribuyen a incomodarnos respecto a esa verdad que aguarda a ser destapada. A esto me refería más arriba, se nota un ojo entrenado como director pese a ser una ópera prima. Es aparente incluso a la hora de dirigir a los actores por el sinuoso camino entre tomarse las cosas en serio y ser totalmente cheessy e histriónico.
Society tiene un contenido sexual implícito muy fuerte. Esta es una de las características que Cronenberg puso en la mesa del horror, el miedo corporeo, los fluidos, lo mórbido de la carne y sus necesidades. El sexo es uno de los rieles por donde transitan las intrigas de Bill, el murmullo del incesto, la hibridacion y demás cosas bellas están latentes bajo la piel de la película. Tal vez por eso tardo tanto en ser aceptada en su tierra natal, aunque no es totalmente gráfica si es conceptualmente potente.
Luego de un inicio cercano al suspenso, hay un tercer acto bien marcado y por el cual es mayormente recordada Society. Digamos que tiene una última media hora bastante intensa y donde todo lo insinuado explota de la mejor/peor manera. Nos deja por un lado un par de momentos realmente grotescos, y por el otro, una gran película que critica a la burguesía y al metabolismo voraz del capitalismo. Muchos encuentran paralelismos con cintas como Crash (la de Cronenberg, no el otro desastre) They Live! de Carpenter e incluso Bad Taste de Peter Jackson, pero lo cierto es que tiene una voz propia y muy original. Society es una joyita un tanto dejada de lado que merece ser vista por todo fan del horror, eso sí, absténganse los fácilmente asqueables. ¡No hay nada como la familia!
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