In Bruges es la opera prima del enfermo mental
de Martin McDonagh, un londinense muy particular que a pesar de haber nacido en
el ambiente del teatro, siempre busco imprimir un humor negrísimo, cantidades de
violencia y un tono cinematográfico a
todas sus producciones.
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| Vos sos el trolazo de Corazón Valiente |
¿Qué es Escondidos en Brujas y porque es tan
genial? En principio es una comedia oscurísima, el humor británico más
incorrecto de la década pasada (obvio que junto al gran Edgar Wright) todo
gracias a la excelente química entre Brendan
Gleeson (Ken) y Collin Farrell (Ray) como dos sicarios sensibles que luego de
un trabajo con complicaciones, se ocultan en Bélgica esperando instrucciones de
su jefe Harry (Ralph Fiennes). No solo funciona como comedia sino que la estética
de cine negro y sus momentos de tensión son espectaculares y se amalgaman perfectamente
al humor sutil y conversacional. La elección
de Brujas (una ciudad mítica con una arquitectura tan bella y antigua que
parece salida directo de la edad media) parece puro azar como en la película
misma, pero como marco de esta historia bizarra de asesinos traumados y
mafiosos con honor pareciera que ninguna otra ciudad en el mundo hubiese sido más
apropiada. Tal como dice Ray, Brujas es el infierno.
Volviendo al punto sobre Farrell y Gleeson,
los mejores momentos de la película son definitivamente el intercambio de
latiguillos sutiles y las charlas estúpidamente descolocadas entre ellos dos.
Particularmente Collin la descose como un matón traumado y mal educado que
lleva a la octava potencia todos los clichés sobre los irlandeses y su
comportamiento desmadrado. En el medio de su estadía forzada en Bélgica (algo que deprime a Ray ya que
considera Brujas un completo “shithole”, para descontento de Ken que solo
quiere hacer turismo) cruzaran su camino con una variedad de personajes
totalmente extravagantes pero que a la larga jugaran roles importantes en el
desenlace de la historia. Algunos de ellos son Jimmy, un actor enano adicto al
tranquilizante para caballos y Chloe, una asistente de cámara que en su tiempo
libre trafica drogas y asalta turistas estúpidos.
In Bruges está perfectamente escrita para
equilibrar las dosis de thriller criminal, comedia británica y drama (si, también
hay lugar para un par de escenas reflexivas sobre el trabajo que se complico) con
una naturalidad e ironía trágica propia de los primeros laburos de Guy Ritchie
y Tarantino, pero con un sello muy notorio de Mc Donagh, quien muestra mucha personalidad
y carácter a la hora de dirigir su primer película. La experiencia teatral se ve.
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No la recomendaría jamás como una comedia
redonda, de hecho esta tan amalgamada la trama criminal y el aspecto psicológico
y dramático de los personajes principales que definir In Bruges como una u otra
cosa es no hacerle justicia al excelente trabajo del director para llegar a ese
balance. En definitiva ese balance extraño es lo que la hace tan disfrutable a
este peliculón. Mandale play con confianza.
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